domingo, 27 de abril de 2014

Coca de yogur


Este es quizás el bizcocho más conocido, y el primero que nos aventuramos a hacer por primera vez en el horno. Tiene muchas ventajas, porque siempre sale bien y es muy, muy fácil de realizar. Las medidas se toman utilizando el envase vacío de un yogur.
La receta original lleva 1 medida de yogur de aceite, 2 de azúcar y 3 de harina, pero yo he ido modificándola un pelín, prefiero echarle  un poco menos de azúcar a la masa y espolvorearla por encima antes de hornearla, ya que se crea una capa crujiente y deliciosa por encima, es la parte que más gusta a los niños.
También le añado 1/2 cucharadita de matalahúga en polvo porque le da un sabor muy bueno.
En cuanto a la harina, antes siempre le ponía las 3 medidas de yogur, ahora miro la consistencia de la masa, ya que debe quedar cremosa, no demasiado densa o el bizcocho quedará muy compacto, y no tan suave y esponjoso como querríamos. Por ello, como he hecho servir huevos medianos, con 2 medidas y ½ de yogur he tenido suficiente.
Si tenéis niños pequeños les encantaran tanto la versión normal como la de gotitas de chocolate.
He utilizado dos moldes de 17 cm., porque a uno le he puesto gotitas de chocolate y al otro no. Las medidas sirven igual para uno de 25 cm.

INGREDIENTES
3 huevos
1 limón (sólo la parte amarilla de la cáscara)
1 yogur natural
1 medida de yogur de aceite de oliva
1 ½ medidas de yogur de azúcar
2 ½ medidas de yogur de harina
½ cucharadita de matalahúga en polvo (opcional)
1 sobre de polvo para hornear
Azúcar para espolvorear antes de hornear
Azúcar glas para espolvorear después de hornear
30g de gotitas de chocolate
ELABORACIÓN
En primer lugar prepararemos los moldes. Con la ayuda de un trocito de papel de cocina, extenderemos un poco de mantequilla por todo el molde, y luego podemos forrarlo con un círculo de papel de hornear o espolvorear un poco de harina, para que el bizcocho no se nos pegue.
Encenderemos el horno a 180º, para que vaya calentándose, ya que la preparación es rápida.
A continuación, prepararemos el resto de los ingredientes, y comenzaremos cascando los huevos en un cuenco a parte uno por uno para evitar que nos caigan cáscaras o que al salirnos uno en mal estado nos estropee los otros.
Los iremos disponiendo en el bol donde realizaremos la masa.
Una vez tengamos los huevos añadiremos el azúcar y batiremos con las varillas manuales, seguidamente, incorporaremos la ralladura del limón (evitando la parte blanca porque amarga), y el aceite. Volvemos a mezclar.



Ahora toca el turno de la harina tamizada (utilizamos un colador si no tenemos tamizador y de este modo nos quedará más esponjoso) con la levadura, y la ½ cucharadita de matalahúga en polvo (hoy en día la encontramos en casi todos los supermercados). Repetimos de nuevo la operación y volvemos a mezclar, pero ahora los movimientos deben de ser más delicados.



Si lo hacéis en dos moldes, vertéis la masa hasta la mitad de uno de ellos, y añadimos a la mitad que nos queda en el bol el chocolate. Para que no se nos vaya al fondo las gotitas de chocolate pasarlas por un poco de harina, y quitarles el exceso poniéndolas en un colador.
Una vez hecho esto mezclamos y vertemos esta masa en el segundo molde, aproximadamente hasta la mitad de este.



Introduciremos los moldes en el horno durante unos 35 minutos, cuando lleve unos 30 podemos introducir en el centro un palillo para comprobar como va la cocción. Cuando el palillo salga limpio esta hecho.

Finalmente, sacamos el bizcocho del horno, y esperaremos unos 10 minutos antes de desmoldarlo y colocarlo sobre una rejilla (esto es importante, ya que si lo dejas sobre una superficie plana creará humedad por el vapor que todavía desprende). Una vez se haya enfriado, lo espolvorearemos con azúcar glas. Esto es una incorporación nueva de estos tiempos en que se cuida más la presentación, cuando yo era niña no se ponía, y estaba igual de rico o más, ya que estábamos toda la tarde jugando en la calle y teníamos un hambre voraz.




miércoles, 23 de abril de 2014

Rosas de mazapán


Hoy se celebra la Diada de Sant Jordi, y para un día tan especial donde los enamorados se regalan rosas y libros, os propongo unas rosas diferentes, dulces, suaves, y lindas, rellenas de mazapán, aunque las podéis rellenar de lo que queráis.
En este caso he elegido el mazapán, porque me regalaron una barra, pero con crema tienen que estar muy buenas, y con chocolate mejor, porque con los sobrantes hice unos mini bollitos rellenos con onzas de chocolate con leche y volaron.

Como hoy es un día donde el amor está en el aire, pero también la literatura, que menos que uno de los pasajes del “Tirant lo Blanc” de Joanot Martorell, donde aparece una de las declaraciones de amor más originales y bonitas de la literatura.
-I penseu vós, Tirant -digué la princesa-, que les coses que s'han de tenir en secret jo les volgués anar a dir al senyor mon pare o alguna altra persona? Jo no vaig vestida d'aquest color que us penseu, per tant, no tingueu por de dir-me tot el que us passa, car jo ho tindré tancat dins del meu recambró secret.
-Senyora, ja que l'altesa vostra em força a dir-ho, no puc dir res més sinó que amo.
I no digué res més, sinó que abaixà els ulls cap a les faldes de la princesa.
-Digueu-me, Tirant -digué la princesa-, per Déu, que us deixi obtenir el que desitgeu, digueu-me qui és la senyora que tant de mal us fa passar, perquè, si us puc ajudar en res, ho faré de molt bona voluntant, car estic impacient de saber-ho.
Tirant es posà la mà a la mànega i tragué l'espill, i digué:
-Senyora, la imatge que hi veureu em pot donar mort o vida. Mani-li, vostra altesa que em tingui pietat.
La princesa prengué de seguida l'espill i, amb cuitats passos, entrà a la cambra pensant que hi trobaria alguna dona pintada, però no hi veié res sinó la seva cara. Llavors ella comprengué perfectament que per ella es feia la festa i s'admirà molt que hom pogués requerir d'amors una dama sense parlar.
Tirant, se ha enamorado de la hija del emperador, Carmesina, y como sabe que tendrán un encuentro, se prepara con antelación. Manda comprar el espejo más bello que se pueda encontrar, y se lo esconde en la manga. El día de la cita durante uno de los descansos de la reunión cortesana, en medio de un baile, y aprovechando que el emperador esta distraído, Carmesina lleva de la mano a Tirant, hasta una ventana. En este lugar le pide que le declare sus preocupaciones. Como el caballero pone excusas ella insiste, de este modo a Tirant se le presanta el momento idóneo para jugar su carta. Entrega el espejo a Carmesina y le dice:
- Señora, la imagen que veréis me puede dar la vida o la muerte.
La princesa toma apresuradamente el espejo y se va corriendo a su habitación pensando que encontraría la imagen de una mujer pintada, pero lo que aparece ante ella es su rostro.
Que bonito, ya no existen declaraciones tan originales.

INGREDIENTES
- 520g de harina
- 180g de azúcar
- La pulpa de una vaina de vainilla, o 2 cucharaditas de extracto de vainilla.
- ½ cucharadita de matalahúga en polvo
- 3 yemas
- 190ml de leche templada
- 7g de levadura seca o 25g de levadura fresca
- La ralladura de un limón
- 100g de mantequilla
Para el relleno
- 200g de mazapán
- Azúcar glas para espolvorear
- 1 huevo batido para pincelar
ELABORACIÓN
En primer lugar, dispondremos la harina en un cuenco, junto a la ralladura de limón, la levadura seca, el azúcar, la pulpa de la vainilla y la matalahúga. Mezclaremos todos los ingredientes secos para que queden bien repartidos.

A continuación, añadiremos las 3 yemas, la mantequilla a temperatura ambiente, y la leche templada. Amasaremos los ingredientes, hasta forma una masa compacta. Colocaremos la masa en un recipiente engrasado y lo cubriremos con papel film o un paño. Lo dejaremos reposar en un lugar cálido hasta que doble su volumen, pensar que la masa de bollería suele tardar más que la de pan.



Cuando la masa haya subido, la volcaremos sobre la superficie de trabajo, la amasaremos de nuevo y la dividiremos en 4 partes.
 Estiraremos la masa con el rodillo, y con un corta pastas formaremos discos del tamaño deseado.
Ahora realizaremos unos cortes como los de la foto, desde el borde hasta el centro del disco, sin llegar a cortar por completo.




Seguidamente, colocaremos en el centro el relleno.
Cogeremos uno de los pétalos de la masa y lo recogeremos sobre el relleno, presionando las esquinas por debajo de él.
Y continuaremos con los demás pétalos, hasta formar la rosa.






Las colocaremos en la bandeja sobre papel de hornear, y  las taparemos para dejarlas reposar una media hora, una vez transcurrido ese tiempo, las pintaremos con huevo batido.

Las llevaremos al horno precalentado a 190º, y las cocinaremos entre 13-15 minutos.
Finalmente, las dejaremos enfriar, y las espolvorearemos con azúcar glas.

Feliz y muy dulces Sant Jordi!!!!

lunes, 21 de abril de 2014

Thumbprints de chocolate, vestidos para pascua


Estas galletas que hoy os propongo son suaves, y deliciosas, pero también divertidas, ideales para una fiesta infantil.
Como la mona de pascua se la regala todos los años su madrina, no tengo que hacerla, así que vestiremos estas galletas de pascua, colocándoles unos huevitos de chocolate blanco y unas plumitas de colores.
Son unas galletas muy fáciles, pero requieren un poquitín de tiempo. En vez de mermelada, o glaseado, yo he optado por hacerle un  ganache  de chocolate, sólo que reduciendo un poco la nata para que el chocolate adquiera una consistencia más dura, pero a la vez cremosa.
Salen aproximadamente entre 20-22 galletas, pero son bastante grandes y gorditas, así que con dos te llenas. No son aptas para la operación bikini, pero están buenísimas, de modo que tendremos que buscar, otras opciones más interesantes para perder los kilos y no dejar de comerlas.

INGREDIENTES
220g de mantequilla a temperatura ambiente
150g de azúcar
La pulpa de una vaina de vainilla
60g de cacao sin azúcar
300g de harina
La yema de 1 huevo
Una pizca de sal (3g)
½ cucharadita de bicarbonato de sodio
1 cucharadita de polvo para hornear
Para el relleno
100g de chocolate de cobertura
40 ml de nata
Para decorar
Azúcar de colores
Unos huevitos de chocolate
Unas plumitas de colores
ELABORACIÓN
En primer lugar, mezclaremos en un bol la harina, la sal, la levadura en polvo, el bicarbonato, el cacao en polvo, y lo removeremos bien para que queden todos los ingredientes bien distribuidos.


En otro cuenco, mezclaremos la mantequilla, el azúcar, y la pulpa de la vaina de vainilla, hasta obtener una textura cremosa, y luego iremos añadiendo los huevos uno a uno, para integrarlos perfectamente a la masa.
A continuación, verteremos la crema obtenida en el cuenco de los ingredientes secos, y amasaremos suavemente hasta obtener una masa compacta.






Seguidamente, formaremos bolas de unas 30-34g cada una y las iremos disponiendo en una bandeja de hornear forrada con papel encerado. Llevaremos la bandeja a la nevera unos 20 o 30 minutos.



Una vez transcurrido el tiempo, sacaremos la bandeja y con una esteca de bolillo marcaremos una pequeña impresión redonda (utilizaremos el lado más grande de la esteca)en el centro de cada bola. Y las llevaremos al horno, que ya estará precalentado a 180º, durante unos 8-9 minutos.



Sacaremos la bandeja, y aprovechando que las galletas están muy tiernas para marcar con suavidad  la hendidura. Puedes volver a utilizar la esteca de bolillo o algún utensilio que tenga una terminación redonda o semiesférica (en mi caso utilicé la parte interior del prensador de ajos).



Ahora de nuevo, volveremos a introducir la bandeja en el horno durante 7 minutos más.
Si al sacarlas del horno veis que el hueco está poco marcado, con suavidad, esta vez si con la esteca de bolillo  presionáis un poco para darle el tamaño deseado.

Hay que dejarla unos 7 o 10 minutos en la bandeja antes de pasarlas a la rejilla de enfriar, ya que cuando salen del horno están muy blandas.
Cuando se hayan enfriado completamente, es el momento de rellenarlas. Para ello derretiremos el chocolate junto a la nata, al baño maría o en el microondas (en intervalos cortos de medio segundo, sino quemaremos el chocolate), y con una cucharita iremos colocando la mezcla en el interior de cada galleta, si prefieres puedes utilizar una manga pastelera, pero con la cucharita sale bien, y si queda alguna imperfección quedará tapada con la decoración.



Finalmente, las dejaremos reposar unos 15 minutos y espolvorearemos la decoración elegida.